jueves, 30 de octubre de 2008

¿Lo que ya no está?

La historia de la tristeza cuando ya se fue y no quedó nada. Quedó el viento. Quedaron las palabras. Quedaron las hojas marchitas de lo que alguna vez fue el fuego de la amistad eterna. Sensaciones disímiles manchan la vida de la pobre tristeza. Ella ha sido abandonada y llora. Ya nadie la llama. Nadie tiene su teléfono.
Pero desde este blog nos pudimos comunicar con ella. Y nos concedió una entrevista.


¿Usted piensa que no la llaman más porque ya no la necesitan?


Sí, están convencidos de eso. Al principio no lo creía. Me reía yo, mirá que estúpida. Pero no. Me empezaron a dejar de llamar, rápido, muy rápido pasó todo, tanto que casi ni me enteré. Quedaban pocas personas amigas mías, y les pregunté “¿qué sucede?”.

¿Y respondieron… ?

Según ellos ya no era su amiga. Ahora estaban mejor, estaban “curados” decían. No supe más nada de ellos.



La tristeza me colgó, no quería hablar más conmigo porque a mí tampoco me contaba entre sus amigos. Desde ese momento nunca, nadie jamás supo algo de ella.

martes, 28 de octubre de 2008

Viendo cómo gira el mundo

Estoy cansado de no entender nada. Estoy cansado de ser observado por la tele, programado por la computadora, llevado por los autos, y enseñado por los maestros. Y pregunto, ¿dónde estoy yo? ¿dónde? Ya busqué respuestas y no las encontré. Ya busqué soluciones y no las hay. Me pregunto si estoy condenado a callarme y hacer uno más en este hormiguero que es la Tierra. ¿Estoy condenado? ¿Tengo que comprar el discurso idiota, que me roba el pensamiento? Me roba a mí mismo. Me roba.

Tal vez pueda refugiarme, tal vez exista una guarida, tal vez... ¿No está todo al revés? Será que al mundo no lo entiendo... No entiendo por qué hacemos el amor. Tal vez no hacemos el amor, simplemente garchamos. Tal vez no tenemos amor, simplemente estamos juntos sin saber bien por qué. ¡NOooooooo!

El amor existe y resiste, y está muy ahí, adentro nuestro, donde no lo vemos. Cuando buscamos alrededor y no está, en realidad está ahí, adelante, persistente. Ese amor no se vende, no se compra, no se sube a internet ni se muestra por la tele. Tampoco se escucha en el i-pod.

Me morí, no estoy, me fui. ¡¡Me elevé??? ¡¡Qué será de todos nosotros??? ¿Nos moriremos inundados porque se calló Wall Street y con ella los cayeron los glaciares que desterraron al mundo? Sólo quedan algunas tierras habitables en lo alto del Aconcagua. En la cima del Planeta donde también está Dios. ¿Dios está en el SOL? ¿Está en el centro del Universo? Preguntas eternas nos seguiremos haciendo una y otra vez y tal vez nunca jamás en la historia de miles de millones de personas hallemos una respuesta. Ni UNA tal vez.

Por eso somos los condenados. Condenados a las preguntas eternas. A lo etéreo. A lo efímero. A lo mortal. Apurate porque se acaba.